El Partido Verde Ecologista de México (PVEM) se lanzará por 11 gubernaturas por su propia cuenta mientras que buscará ir en conjunto con Morena en 4 entidades, entre ellas Nuevo León, dónde ya se firmó el convenio.
Las otras entidades donde prevén buscar la coalición son Nayarit, Zacatecas y probablemente Sonora, de acuerdo con la nueva dirigente del partido, Karen Castrejón.
“Se van a elegir 15 gubernaturas de las cuales como partido estamos explorando ir al menos en 4 en estas alianzas con Morena ya que llevamos la propuesta tal vez de esos mismos candidatos. Del resto, que es la mayoría, tal vez estaremos contendiendo solos con candidatos propios, aceptados con la gente, reconocidos en cada estado”, sostuvo.
En el resto se apelará a los candidatos con los que cuenta el partido para tratar de contender por alguna de las gubernaturas, por lo que consideran que van a caminar solo con el apoyo de la ciudadanía sin que se concrete alianza alguna.
De acuerdo con la revisión que hizo el INE de la militancia de los partidos nacionales, el Verde se encuentra en tercer lugar con 660,874 afiliados, solo detrás del PRI y el PRD, con 2 y 1.2 millones de afiliados respectivamente, y por encima del gobernante Morena, con casi 467,000 afiliados.
Una de las metas de la primera presidenta del PVEM es respetar la petición del INE de mantener la paridad de género en las candidaturas, donde en al menos 3 entidades ya se contempla la postulación en definitiva de una mujer.
“Hasta este momento, Baja California, Baja California Sur, seguramente en el municipio de Tlaxcala, Nuevo León, como lo hemos dado a conocer, estos son los que posiblemente puedan ser ya de mujer”, sostuvo.
En cuanto a la disolución de la posibilidad de alianzas tanto en San Luis Potosí como en Guerrero, Castrejón resaltó que las diferencias se dieron con Morena por el intento de imposición de candidaturas.
“Como partido no podemos permitir imposiciones, nos mantenemos muy firmes ante el tema de poder proponer nosotros también a candidatos y hablo específicamente en el tema de San Luis Potosí, el pedir ante estas alianzas que cada uno de los partidos pueda proponer, se puedan medir, llevar encuestas y el que salga mayor aceptado por la gente, el partido así lo reconoce e iremos. Pero si de esta manera no se ha podido concretar y mantener estos acuerdos, no podemos ir juntos”, explicó.
En cuanto a la relación con los partidos mayoritarios para la conservación del registro, Castrejón detalló que, a raíz de la última reforma electoral de 2014, aun cuando se vaya en alianza, no hay transferencia de voto (como le ocurrió al Partido Encuentro Social en 2018 cuando ganó la Presidencia pero perdió su registro), por lo que su continuidad depende exclusivamente de los votantes por su partido y la respuesta que den los ciudadanos en la votación.
“Mantenernos como una de las principales fuerzas políticas de este país, dando resultados sobre todo a la gente. Nos debemos a los ciudadanos. Ante esta situación en la que estamos viviendo, con la cantidad de propuestas, es sumamente para los ciudadanos participar de la manera que consideren. Como partido estamos seguros del trabajo que venimos haciendo durante muchos años con una militancia fuerte, pero más que ello, el acercamiento con los ciudadanos”, defendió.
Respecto a una posible alianza de cara a los comicios federales, acotó que el límite para resolver el tipo de alianza que conformarán es el 23 de diciembre, pero adelantó que buscarán una coalición flexible,
“Ha habido acercamientos, hoy no hay nada concretado. Pero aun cuando se llegará a concretar algo, no lo haríamos de una manera completa, tendría que ser algo parcial. Como partido, en las alianzas quienes más perdemos somos los partidos menores, no hay transferencia de votos y ante estos partidos grandes, los pequeños terminamos perdiendo votos, porque ante la percepción ciudadana siempre hay quien trae el mayor cúmulo de gente. Nosotros más bien vamos por un proyecto para que nuestras propuestas puedan ser ley”, estimó.
A pesar de que desde el interior del PVEM consideran importante que exista un equilibrio de fuerzas en la Cámara de Diputados que pueda servir de contrapeso para el Ejecutivo federal, de momento Castrejón aclaró que no han tenido un acercamiento con la oposición, pero dejó abierta la puerta para hablar con ellos.
“Aquí no se trata de pelearnos con nadie. Tendríamos que estar trabajando en los temas de rendición de cuentas, estamos abiertos a las pláticas, pero hasta hoy no ha habido esa ruta de comunicación”, acotó.
Uno de los principales desafíos que tiene la nueva lideresa del Partido Verde está en el cambio de percepción de la imagen que tiene el electorado del partido, otrora asociado con escándalos, prácticas anómalas, y sobre todo, con su oportunismo para asociarse siempre con el partido en el poder.
“El partido independientemente de las alianzas en las que vamos, siempre hemos mantenido nuestra propia ideología, nunca le hemos dado la espalda a nuestros propios proyectos, a nuestra propia agenda, y aun cuando en una alianza se arma una agenda o plataforma donde suman todos los partidos siempre ha sido en beneficio de la gente”, defendió la nueva lideresa verde.
A su juicio, el PVEM ha representado la suma para que los partidos que en su momento fueron oposición alcanzaran el poder, como fue el caso del PAN en 2000 en la elección presidencial, o el PRI en 2012 con Enrique Peña Nieto, enlistó.
“¿Qué pasó más adelante? Estas coincidencias ya no se siguieron, el partido siempre ha mantenido su propia propuesta, su propia ideología”, insistió.
“El Verde siempre ha sido muy leal. Nosotros nos aliamos con las personas, con los proyectos, y en este proyecto nosotros apoyamos, impulsamos estas reformas estructurales que se dieron”, sostuvo.
Fuente: Forbes